Apartamentos edificio Balmes 76

En la última planta de un edificio de viviendas situado en el corazón del Eixample, hay tres viviendas de dimensiones más o menos reducidas, con amplias terrazas y estupendas vistas de la ciudad. El programa se corresponde con el de cualquier vivienda de estas dimensiones: un único espacio común donde se agrupan la cocina, el comedor, el salón y dos dormitorios con sus respectivos baños.

Aunque la vivienda esté destinada al mercado de alquiler, lo que podría suponer una estandarización de los acabados, se ha optado por realzar las virtudes que generalmente acompañan esta tipología de edificios. Así pues, se dejan a la vista los techos formados por viguetas y revoltones, se recuperan las carpinterías originales de madera de pino en el interior de la vivienda y se sustituyen las carpinterías de aluminio por unas de madera maciza en los cerramientos al exterior. La relación de los espacios interiores con la terraza exterior, marca cómo ha de resolverse la distribución interior.

La sencillez con la que se ha trabajado el proyecto, sin pretender añadir ningún material que pueda vincularse al lujo, da como resultado un espacio acogedor y funcional.