Oficinas Desigual – Centro Logístico Viladecans

Edificio de gran envergadura emplazado en un área ocupada por naves destinadas al almacenamiento y a la industria. Por su posición, el volumen es muy visible incluso en distancias de varios kilómetros.

Se trata de dos edificios unidos entre sí por un puente. El de menor tamaño se destina exclusivamente al almacenamiento del producto. Largos pasillos con estanterías a lado y lado son recorridos por robots que seleccionan el lugar donde dejar o retirar la mercancía. El de mayor tamaño incluye, por un lado, toda la cadena de empaquetado y distribución del producto para ser almacenado o cargado en los camiones de reparto. Por otro lado, ocupando una menor superficie, tiene las oficinas donde se gestionan todas las operaciones de distribución. El encargo realizado por el cliente consistía en organizar, distribuir y amueblar la zona destinada a oficinas, revisar la relación de esta zona con el resto de la nave, dar una solución a los alzados de ambos edificios y trabajar los espacios exteriores.

El objetivo principal fue trabajar los alzados del edificio para dar una solución atractiva del conjunto. La desconsideración que habitualmente se tiene en la composición de los elementos de cierre de las naves, aquí no debía suceder. Contrariamente, se trataba de dar cierta dignidad a un entorno industrial donde habitualmente pesa más las soluciones puramente funcionales, de bajo coste y sin criterio compositivo.

Se mantiene la solución de paneles de hormigón prefabricado planteado inicialmente por la ingeniería, alternándolo a modo de damero con aberturas de iguales medidas que los paneles de hormigón, en dos de las fachadas del volumen de mayor tamaño. Estas aberturas iluminan de forma uniforme el espacio interior destinado al empaquetado y distribución.

Se trabaja más en detalle la fachada que cierra el espacio destinado a oficinas. Una doble piel, la primera consistente en una superficie completamente acristalada y, la segunda, la más exterior, un plano de cierre permeable que ofrece una protección solar al espacio interior. El trabajo principal consistió en determinar el grado de perforación de la piel exterior para dar el punto justo de luz y de visión al espacio interior. Esta fachada, compuesta por 811 paneles de acero perforado, cada uno de ellos con su propio diseño, es la que ofrece al exterior la imagen de la marca. Pero, no se trataba tan solo de entender y reconocer la empresa a través de este lienzo de 78x26m, sino que también se pretendía dar una solución que aportara esa dignidad de la que hablaba anteriormente. El juego de luz y sombra conseguido a través de las perforaciones de las chapas, recuerda aquel que tiene lugar en las masas de árboles.

Es decir, podríamos decir que esta fachada sería la reproducción abstracta de un efecto propio de mundo natural. Por otro lado, este alzado es el perfecto fondo de las hileras de árboles plantados en la avenida que hay frente al mismo.

El cuarto alzado, el que da frente al silo, es completamente ciego. Los elementos de cierre siguen siendo los paneles de hormigón prefabricado.

El silo, también dispone de una piel completamente ciega, pero en este caso utilizando paneles sándwich.

La neutralidad de estas paredes hace que estos volúmenes aparezcan como monolitos en el paisaje que, por su simplicidad, pasan más desapercibidos que otras construcciones que se presentan con infinitos pequeños guiños y tics.

La alusión a la naturaleza no sólo se produce en ese alzado principal del que hablábamos en el párrafo anterior, sino que también vuelve a aparecer en la solución dada a la plaza de acceso. Un pavimento según un formato parecido al de las hojas de algunos árboles y plantas, utilizando tres colores, reproducen el mundo vegetal.  El efecto de esta alfombra de hojas se intuye cuando se recorre la plaza, pero se hace realmente evidente cuando se sale a las terrazas de las plantas destinadas a oficinas.

En el diseño interior del edificio no hemos pretendido camuflar el hecho de encontrarnos en una gran nave. La altura libre entre forjados es superior a la que normalmente se tiene en los espacios de oficinas. Las instalaciones vistas, la poca sofisticación de algunas soluciones constructivas y la franca abertura del espacio administrativo al espacio robotizado y mecanizado, recuerdan en todo momento la tipología del edificio y la zona en la que nos encontramos. Sin embargo, cuando esto se acompaña de soluciones más cálidas, ya sea en el tipo de pavimento escogido, el mobiliario, la madera utilizada en las divisorias que compartimentan los espacios interiores, etc., resultan ambientes muy confortables.

Para equilibrar las condiciones lumínicas de las zonas de trabajo que se encuentran en la parte más interior del edificio, se optó por abrir una gran claraboya en cubierta. Eliminando los forjados bajo la claraboya, dando lugar a un espacio de triple altura, la luz natural llega hasta la planta baja. Este pozo de luz y la fachada de doble piel mantienen un nivel de luz natural constante en toda la superficie destinada a oficinas.

Año

  • 2015

Localización

  • Calle Jocelyn Bell 90, Viladecans. Barcelona

Superficie

  • 26.131m² parcela + 3.596 m² oficinas